Como comenzar un emprendimiento (y casi morir en el intento)

En junio de 2020 en Colombia se fundó nuestra compañía llamada Oranch.

Todo comenzó cuando en plena pandemia por el coronavirus nos reunimos mi prima, mi hermana y yo a pensar que iba a ser de nuestras vidas jaja, como íbamos a generar dinero a pesar de la situación mundial que estábamos atravesando. Por supuesto pasaron por nuestras mentes miles de opciones, desde tapabocas hasta gel antibacterial.

Nuestro sueño siempre había sido tener una tienda de ropa, pero con esto del covid creímos que nadie iba a comprarla, porque estábamos encerrados, en cuarentena total. Hasta que un día hablando, concordamos que podíamos crear nuestro emprendimiento, pero dándole un giro  completamente distinto, decidimos hacer ropa muy bonita pero para estar en casa, pues como nadie salía queríamos vender la idea de que podías estar a la moda sin salir de casa.

Así que, agarramos nuestros ahorros y los invertimos en Oranch, pusimos todas nuestras ilusiones allí, estábamos super seguras que sería muy fácil empezar con nuestra  empresa y obviamente estábamos equivocadas.

Cometimos errores desde el principio, uno de ellos fue contratar a alguien para que manejara nuestro social media, Jajaja si, lo hicimos y obviamente no dio frutos.  Otro error fue participar en concursos que nos daba seguidores, eso lo pagamos bien caro mas tarde.

Al principio la empresa se mantuvo porque una prima de nosotras compraba cada diseño nuevo que sacábamos, pero externamente no empezamos a vender sino como hasta el segundo mes, creo, no estoy muy segura.

Poco a poco empezamos a vender mas, pero no estábamos haciendo un buen uso del marketing en la empresa, las ventas no alcanzaban a reponer los costos que teníamos mensuales, gracias a Dios, las que nos confeccionaban la ropa eran mi mamá y mi tía, porque muchas veces no teníamos para pagarle mensual el monto completo de lo que confeccionaban entonces le pagábamos de a poco.

En octubre cambiamos el objetivo de la marca, ya no queríamos solo ofrecer ropa a la moda para estar dentro de la casa, sino también fuera, pues ya empezaban las personas a salir a sus tratas y tratar de recobrar su vida pre covid.

Llego noviembre, uno de los peores meses desde que comenzamos, no vendimos NADA ese mes, horrible. ES desesperante pensar que no vas a tener como pagar las deudas, y que le has invertido tanto tiempo y dinero  a tu empresa que no quieres que muera.

En diciembre todo mejoró, gracias a Dios, vendimos muchísimo, y repusimos lo que veníamos perdiendo, pero nos dimos cuenta de algo. No le estábamos llegando a nuevas personas, le estábamos vendiendo a las mismas cinco o seis (que han sido clientas fieles desde el inicio y gracias a Dios que están) pero queríamos llegar a nuevos consumidores y para rematar, Instagram nos había bloqueado la cuenta (aún no sabemos por qué, pero creemos que fue gracias al concurso que les comenté anteriormente) y dejamos de tener alcancé en nuestra cuenta.

En enero decidimos cerrar ese Instagram y abrir uno nuevo, con una idea mucho más clara y organizada de lo que queríamos.  Despedimos a nuestra amiga, que nos ayudaba con las redes y la edición y decidimos hacerlo nosotras mismas, para ahorrar lo más que pudiésemos.

Así fue como en febrero abrimos una nueva cuenta de Instagram, y hemos ido mejorando y aumentando nuestros seguidores y alcance de una manera muy lenta y orgánica, pero confiadas en que estamos enfocando nuestro contenido  al sector adecuado.

En Oranch queremos vestir a la mujer joven, fresca, elegante, relajada; una mujer real, y queremos acompañarla en cada paso que da con nuestras prendas.  Oranch es una empresa que te vende moda y estilo a un precio muy razonable, te da la oportunidad de brillar con cada prenda y hace que lo que parece imposible se materialice en nuestros diseños. También estamos siempre a la vanguardia y te estaremos asesorando en las tendencias que están rigiendo la moda para que nuestras #Oranchlovers (el nombre que le dimos a nuestras clientas) siempre estén al tanto de los temas más chic del momento.

Emprender no es fácil, no es como lo pintan, no es color de rosa, es más, te vas a conseguir un camino lleno de obstáculos, lleno de desilusión, desmotivación y duda, pero lo más importante que te puedo decir, es que la DISCIPLINA es lo primordial a la hora de emprender, porque cada pequeño paso, te llevará al éxito.

 Instagram @oranch.co

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